Adéntrate en una experiencia única y especializada con la Clínica de Medicina Materno Fetal. Si estás buscando un cuidado excepcional durante tu embarazo, has llegado al lugar indicado. En nuestra Clínica de Medicina Materno Fetal, encontrarás un equipo de profesionales altamente capacitados y dedicados a brindarte una atención integral y especializada para ti y tu bebé.
Desde el momento en que pongas un pie en nuestra Clínica de Medicina Materno Fetal, sentirás la calidez y la confianza que nos caracteriza. Nos enorgullece ofrecerte una experiencia médica de primer nivel, respaldada por los avances científicos y tecnológicos más recientes. Cada detalle de nuestras instalaciones ha sido cuidadosamente diseñado para brindarte comodidad y tranquilidad en cada visita.
Una Clínica de Medicina Materno-Fetal se especializa en brindar atención médica a mujeres embarazadas y a sus bebés nonatos, especialmente en situaciones donde el embarazo se considera de alto riesgo. Estas clínicas cuentan con especialistas en medicina materno-fetal (también conocidos como perinatólogos) quienes tienen la capacitación necesaria para manejar complicaciones durante el embarazo.
Deberías considerar acudir a una Clínica de Medicina Materno-Fetal si estás embarazada y presentas condiciones que puedan poner en riesgo tu salud o la de tu bebé, como enfermedades crónicas, complicaciones en embarazos anteriores, si estás esperando más de un bebé, o si tienes 35 años o más. También es recomendable si tu médico te ha referido a un especialista debido a anormalidades detectadas en tu bebé nonato.
Una Clínica de Medicina Materno-Fetal ofrece una variedad de servicios, incluyendo asesoramiento preconcepcional, atención prenatal especializada, pruebas de diagnóstico prenatal como la amniocentesis y la ecografía de alta resolución, y el manejo de complicaciones durante el embarazo. También pueden proporcionar cuidados postnatales y apoyo para las madres después del parto.
Puedes buscar en línea clínicas de medicina materno-fetal en tu área, o pedirle a tu médico de cabecera que te remita a una. También puedes consultar con tu seguro médico para ver qué clínicas están cubiertas por tu plan.